domingo, 8 de noviembre de 2020

GLOBANT, EL OTRO UNICORNIO ARGENTINO, SIGUE LOS PASOS DE MERCADO LIBRE: DUPLICÓ SU VALOR EN UN AÑO Y SUS FUNDADORES MIRAN A URUGUAY

 

La empresa ya tiene un market cap en Wall Street de USD 8.300 millones, presencia en 17 países y no paró de crecer en medio de la pandemia. Reuniones en Olivos y consultas por nueva residencia fiscal

Por Sebastián Catalano. 8 de Noviembre de 2020

Globant es una empresa desconocida para la mayoría de los argentinos, pero para nada lo es en el mundo de los negocios, donde además por estos días se habla de ella por dos motivos: por sus números y el crecimiento que registra su negocio global en medio de la pandemia, y por sus fundadores y la tendencia a la que se suben cada vez más empresarios argentinos: irse del país en medio de un contexto que consideran de muy alta incertidumbre y, sobre todo, de ahogo impositivo. Se menciona a Globant en charlas en oficinas de tributaristas, en Buenos aires y Uruguay, entre los corredores de Bolsa y también en Olivos. Martín Migoya, CEO y cofundador de la empresa, suele ser uno de los invitados a las reuniones sectoriales con hombres de negocios que organiza, a veces de manera secreta, Alberto Fernández.

Según pudo saber Infobae, Migoya y algunos de sus tres socios fundadores de Globant –Guibert Englebienne, Martín Umaran y Néstor Nocetti– estarían en medio de alguna instancia de esos trámites engorrosos y complicados en los que los tributaristas destacan el riesgo de caen en la doble tributación. Sería el peor de los infiernos: pagar impuestos en dos países. Así lo confirman fuentes empresariales y oficiales, allegados, conocidos y entendidos en la materia, locales y uruguayos. Incluso, la última convocatoria presidencial, el mes pasado, encontró al CEO pasando unos días en Uruguay y tuvo que viajar de urgencia.

Unicornio tech

Este unicornio tecnológico nació en Buenos Aires en 2003, de la mano de cuatro ingenieros que se cansaron de trabajar para otros y, entre cerveza y cerveza en el bar de la esquina de la consultora que los empleaba, se pusieron como meta hacer una empresa moderna y ágil que vendiera servicios informáticos sólo en el exterior. Hicieron un breve plan de negocios en un powerpoint, dictaminaron que el inglés iba a ser el idioma nativo de la startup, armaron la valija y salieron a venderle al mundo.

Fast forward a hoy: la empresa tiene oficinas en 17 países, cotiza en Wall Street, tuvo ingresos por más de USD 659 millones el año pasado y en los últimos 12 meses más que duplicó su valor de mercado: pasó de unos USD 4.000 millones en noviembre de 2019 a USD 8.300 por estas horas (poco más del 10% de lo que vale Mercado Libre, pero casi 6 veces más que YPF). La pandemia aceleró la adopción de sus soluciones en todo en el mundo y la facturación y la presencia global de la empresa se dispararon.

Al otro lado del charco

El paralelismo con Mercado Libre es inevitable. Marcos Galperin y Migoya tienen una muy buena relación, son amigos. Se consultan, hablan, comparten ideas. No sólo eso, ambos recibieron el ticket dorado para ingresar a lo más granado del establishment local y son miembros de AEA, la Asociación Empresaria Argentina. Fueron los primeros empresarios de internet que se sentaron a la mesa que nuclea a los dueños de las empresas más grandes del país: Paolo Rocca, Héctor Magnetto, Alejandro Bulgheroni, Luis Pagani, Eduardo Elsztain y otros.

El alma mater de Mercado Libre se fue a vivir con su familia a Uruguay hace casi un año, justo antes de que asumiera Alberto Fernández. Se fue “cansado del manoseo”, según le aseguró a este medio por entonces una de las personas que mejor lo conocen. “Motivos personales”, adujo formalmente la empresa sin dar más datos de la partida. Razones al margen, lo cierto es que Galperin volvió a cruzar el charco luego de vivir allí durante todo el kirchnerismo y de regresar durante el gobierno de Mauricio Macri, a quien apoyó y llamó a votar el año pasado luego de las PASO. Hasta fiscalizó para Cambiemos en las presidenciales que perdió Macri.

Ahora, Galperin vive en Uruguay y fue uno de los primeros empresarios importantes de la Argentina que tomaron la decisión de irse, seguramente en parte también cansado de las altísimas cargas tributarias. La suba de la alícuota de bienes personales –cuando se saltó de la promesa de 0% de Macri a 2,25% con la ley de Emergencia de Fernández– fue la gota que derramó el vaso para muchos y el gatillo para empezar los trámites para pedir la residencia fiscal del otro lado del Río de la Plata. Por esos días, incluso, ni siquiera estaba tan instalado el tema del impuesto a la riqueza.

Infobae dio más detalles de la situación ayer: según especialistas, entre 11.000 y 25.000 comenzaron a llenar papeles en ese sentido en los últimos tres meses. Otros nombres conocidos que lo hicieron: Federico Tomasevich, de Puente, y Gustavo Grobocopatel, el “rey de la soja”.

“Ni confirmo, ni desmiento. Hablemos de Globant; del resto, no. No me expongo”, le dijo a Infobae Migoya. Su postura es férrea, similar a la de sus socios: insiste con que no habla de su vida personal, ni para bien, ni para mal; ni para confirmar, ni para desmentir; repite que es un tema personal y que no expone al periodismo su vida privada. Sí aclara, por las dudas y en medio de un contexto de salida para muchas multinacionales, que la empresa “de ninguna manera” se va del país.

Estamos pasando un momento muy difícil, que venía mal y se complicó más con la pandemia. Hay muchas cosas pendientes. La brecha cambiaria no ayuda, pero creo que hay buenas intenciones en el Presupuesto. La idea de hacer las cosas más balanceadas (Migoya)

"Viajo mucho, estoy mucho afuera. Soy un ciudadano del mundo, de verdad. Lo que puedo comentar es que desde hace un tiempo estamos analizando la posibilidad de moverme a EEUU o Europa, para estar cerca de mis clientes, dado que somos una empresa cada vez más global. Hoy, más que nunca, tenemos que aprovechar la oportunidad gigante que representa para Argentina la aceleración tecnológica post pandemia y el posicionamiento de liderazgo de Globant. Como parte de esta visión también estamos trayendo más management global para estar en esas geografías, cerca de ellos. Es nuestro plan para seguir creciendo y ampliar nuestra presencia en el país”, argumenta e insiste en no hacer ninguna mención a Uruguay.

Migoya detalla que no tiene previsto ver a Alberto Fernández en los próximos días. Según pudo saber Infobae, la idea de que se mude al país vecino no cayó nada bien en la cima del Gobierno.

El negocio y el país

Este año Globant anunció la compra de gA, otra tech argentina, por USD 75,5 millones y el raid de adquisiciones es sostenido en los últimos tiempos. Migoya detalla que están invirtiendo USD 50 millones para construir tres edificios, en la Ciudad de Buenos Aires, Tandil y Córdoba; que contratarán 5.000 empleados en los próximos dos o tres años; y que mañana anunciarán una donación al Estado nacional de USD 250.000 en 42.000 kits de testeo para el coronavirus.

 “Nuestra industria se disparó: ahora todos tuvieron que hacer la reconversión digital de una vez y muchos nos llamaron. Además, el dinero está barato en el mundo y los activos de las empresas que crecen son más apreciados que antes. Hay tasa negativa y los fondos se vuelcan a activos. Es un momento único donde se dan esos dos fenómenos, y nosotros estamos en el medio. Por eso valemos mucho más… se pone bueno”, detalla el empresario.

- ¿Cómo evalúa la situación económica de la Argentina?

- Estamos pasando un momento muy difícil, que venía mal y se complicó más con la pandemia. Hay muchas cosas pendientes. La brecha cambiaria no ayuda, pero creo que hay buenas intenciones en el Presupuesto. La idea de hacer las cosas más balanceadas. Tengo fe de que, de a poco, la actividad retomará luego de una baja violenta. Espero que se balanceen mejor las cuentas. Insisto, la brecha es muy grave, lo dijo el propio ministro Guzmán. Todos miran ese dól. Tenemos empleados que se van de Globant a trabajar con alguien que le paga desde afuera; se pierden las cargas, los impuestos. La coyuntura es complicada, ojalá que esta “primavera” económica, más la vacuna, generen un clima de que las cosas estarán mejor. Hay que tener mucha disciplina fiscal. Construir un Estado confiable, para que la moneda sea confiable y los argentinos confíen en ella, que en definitiva es confiar en el Estado. Ese trabajo se tiene que hacer muy bien. Se están dando algunos pasos. ¿Son suficientes? No sé, no soy economista.

DESARROLLO DIGITAL: LA OPORTUNIDAD DE LA ARGENTINA EN LA REVOLUCIÓN DE LAS TICS

María Julieta Rumi Melisa Reinhold María Filgueira

8 de noviembre de 2020

En este año marcado por la pandemia de Covid-19, procesos que en otro momento hubieran demandado mucho tiempo, se tuvieron que completar solo en semanas, para posibilitar el teletrabajo, la educación a distancia y la telemedicina. La situación aceleró así la transformación digital en las organizaciones y llevó a analizar la fortalezas y debilidades del ecosistema. Sobre eso hablaron ejecutivos de empresas, emprendedores y académicos, en un encuentro organizado por LA NACION sobre el desarrollo digital de largo plazo.

1. Cómo impulsar la inversión para aliviar la brecha digital

En su presentación, Enrique Carrier, analista de la industria de telecomunicaciones, describió qué se necesita, según su opinión, para expandir el negocio del sector y achicar la brecha digital. "Inversión para conectar a toda la población, un Estado que genere las condiciones para incentivar al sector privado, y más y mejor conectividad para que todas las regiones del país y sus habitantes desarrollen su potencial", enumeró. Agregó que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) "no se desarrollan en una burbuja", sino que dependen en gran parte por el contexto macroeconómico.

También advirtió que el Estado no puede resolver la brecha solo, pero sí debe sentar las bases para que haya más inversiones y para que se pueda llegar a "conectar a la población que está dispersa" por el país.

Según Carrier, en la Argentina hay diferencias entre provincias en cuanto a la conectividad enlos hogares, que se resolverían con más fibra óptica, un uso maximizado de la capacidad inalámbrica y 5G. En este punto, dijo que la Argentina va a tardar en desplegar la quinta generación de tecnologías de telefonía móvil, pero que es importante para el desarrollo de las TICs.

Propiciar la interacción de los actores, lograr infraestructuras físicas mayoristas y moderar la avidez recaudadora son los tres puntos que recalcó como hechos necesarios para bajar los costos del despliegue. "Hay que tener una normativa que sea de referencia y establezca incentivos", cerró.

2. El desafío de explotar el potencial

La pandemia aceleró los procesos de transformación tecnológica. Sin embargo, de cara al futuro la Argentina deberá enfrentar varios desafíos para desarrollar el potencial de las TICs.

"Hemos sabido navegar esta crisis gracias a la transformación digital. Las TICs han jugado un papel fundamental. La transformación digital no es una oportunidad, sino una necesidad", expresó Sebastián Nieto Parra, jefe para América Latina y el Caribe de la OCDE, en diálogo con los periodistas Ignacio Federico y Carla Quiroga.

"Hoy el sector cuenta con más de 70.000 empresas, más de 600.000 empleos y genera incentivos al desarrollo de la tecnología digital. Si a eso le sumamos que la economía es hoy más digital, que la irrupción de la industria 4.0 viene avanzando y que este período de cuarentena aceleró la digitalización de la economía, creo que las TICs tienen una oportunidad muy grande por delante", señaló Damián Testori, director de la consultora Abeceb.

Según señaló, si se mira a nivel global, el Estado regula principalmente al sector para que no haya abusos en las tarifas. Y, por otro lado, para asegurar la conectividad y federalizar el acceso a la comunicación.

En el caso de la Argentina, el director de la consultora Abeceb expresó: "Históricamente hemos visto intervención del Estado en el congelamiento de tarifas. Si una compañía global tiene que tomar decisiones de inversión, miden un poco esas cosas, y eso las puede detener e incluso retraer".

En la misma línea, Marcelo Celani, economista y profesor de la Universidad Torcuato Di Tella, expresó: "Necesitamos una regulación inteligente. No solamente se necesita la estabilidad de las reglas, sino que sean razonables, coherentes y consistentes en función de los objetivos que se tienen".

3. Talento argentino: la razón para seguir apostando

A pesar de las devaluaciones y de la incertidumbre que supuso el nuevo tratamiento de la Ley de Economía del Conocimiento, finalmente sancionada y reglamentada, empresas que producen conocimiento y exportan servicios destacan al talento argentino como la razón para hacer negocios en el país.

"La Argentina tiene un potencial enorme. El talento argentino es único en muchos sentidos. Las oportunidades en el país son de carácter global", afirmó Martín Migoya, cofundador y CEO de Globant, vía Skype, en diálogo con José Del Rio, secretario general de Redacción de la nacion. Migoya dijo que lo alegra haber sido parte de la ola que creó oportunidades "para que la gente no se vaya del país", y listó todas las oficinas que abrió la compañía en distintos puntos de la Argentina.

Por su parte, Roberto Alexander, presidente y gerente general de IBM Argentina, dijo que el país tiene el talento pero que hay que seguir trabajándolo. "Las empresas están transformándose; la pandemia aceleró la transformación digital y hay una oportunidad para repensar las organizaciones no solo en lo tecnológico, sino también en lo cultural. En lo que hace a la tecnología hay una enorme oportunidad en soluciones de inteligencia artificial, blockchain y la nube que permite la colaboración y el armado de ecosistemas. En la Argentina hay un gran ecosistema digital", describió.

Sin embargo, dijo que la economía del conocimiento necesita de un "buen marco" para explotar. En el mismo sentido opinó Gastón Irigoyen, CEO de Naranja X. "Talento hay, pero necesitamos un framework. Es como el deporte: con solo tener el talento no alcanza. Se necesita disciplina y un plan de largo plazo", describió.

Por último, Matías Arturo, Strategy & Consulting Lead for Hispanic South America en Accenture, dijo que la Ley de Economía del Conocimiento permite desarrollar de forma estructurada la oferta de capacidades al mundo, pero que el marco "es inmaduro" y "está desarrollándose a partir de las empresas, el Estado y la regulación".

4. La infraestructura, clave para tener un futuro digital

En un mundo cada vez más digital, el desarrollo de la infraestructura en las telecomunicaciones es clave para que el sector se siga expandiendo y desarrollando. Pero, teniendo en cuenta que es un rubro intensivo en capital y cuyas inversiones son a largo plazo, la seguridad jurídica resulta fundamental para que las compañías apuesten a futuro.

"Las tecnologías digitales son esenciales y tienen muchísimas oportunidades en América Latina si las condiciones apropiadas se instalan. Tenemos un continente joven, con posibilidades de formar mucho capital humano en estos temas y, esencialmente, en el desarrollo de comunicaciones muy poderosas, que son la base fundamental del desarrollo digital", expresó la secretaria general de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (Asiet), Maryleana Méndez.

La experta dialogó desde Costa Rica con el periodista Ignacio Federico y explicó que, para que las compañías inviertan, es necesario que un país cuente con "seguridad jurídica".

"Es un sector intensivo en capital, con muy fuertes inversiones, que se deprecian a largo plazo. Durante muchos años hay que tener el negocio en marcha para poder recuperar lo que se perdió. La seguridad jurídica es básica y fundamental y esto es un elemento que nos preocupa, sobre todo en este momento, ya que definitivamente la recuperación económica es digital", consideró.

Respecto del decreto de necesidad y urgencia (DNU) que en nuestro país congeló los precios de la telefonía móvil, de los servicios de internet y de la televisión por cable y los declaró servicios públicos esenciales en competencia, Méndez consideró que la medida desalienta las inversiones.

"Debe haber reglas adecuadas y no sorpresas. Las implicancias son muchas y hay que manejar con mucho cuidado el tema, porque estamos congelando tarifas y eso significa menos inversiones. La regulación tarifaria es la más intrusiva de las regulaciones, porque es meterse directamente en el negocio", subrayó.

5. Acercar a sociedades aisladas

Si el Covid-19 funcionó como un "acelerador" del desarrollo de las TICs durante este último tiempo, las nuevas conexiones en los lugares "más remotos" de la Argentina tuvieron su propio impacto. El efecto fue mucho más fuerte en las sociedades que estaban aisladas del resto del mundo.

"Estar conectados de forma permanente influye en el bienestar de cada uno de los habitantes", afirmó Walter Nahuel Tripay, jefe de la Base Antártica Esperanza, en diálogo con la periodista Carla Quiroga. Allí viven 10 familias; son en total 63 personas y recién este año tuvieron una conectividad completa en el lugar.

"Antes, para comunicarme tenía que marcar 25 números que me habilitaban un crédito y podía hablar solo un tiempo -dijo-. La conectividad nos permitió estar con nuestros seres queridos todo el día".

"La llegada de la antena de telefonía móvil nos favoreció mucho, porque no teníamos conexión directa a ninguna región importante del país. Hoy, nos podemos conectar con el mundo", describió Ángel Luna, jefe comunal de Chuña, localidad en la provincia de Córdoba. "Era un pueblo prácticamente olvidado", aseguró. Con 500 habitantes, Chuña está 136 kilómetros al norte de la capital.

"En la Puna fue lo mejor que pudimos tener, gracias a eso está la universidad aquí. De ninguna manera hubiéramos podido si Telecom no hubiera instalado todos los aparatos que ha puesto", dijo por su parte Rosario Quispe Warmi, coordinadora de la Universidad de la Puna.

Rosario es una mujer coya y líder natural de la Puna Jujeña. Trabaja para que las comunidades coyas puedan desarrollar su vida en su tierra, sin tener que emigrar forzadamente a las ciudades.

6. La pandemia como estímulo a la creatividad

El creativo publicitario Rodrigo Figueroa Reyes, fundador de FCB&FiRe -la primera red latina de branded content con presencia en nueve ciudades-, habló del nuevo mundo que se abre para la publicidad con la pandemia y dijo que se "dinamizó la cabeza de la gente".

En cuanto a la marca país, dijo que en España (desde donde se comunicó por videoconferencia) le ofrecieron un crédito "sin necesitarlo" con una tasa del 1,8% y a 10 años, cuando en la Argentina "puede haber una tasa del 40% a 15 días". Pero, incluso con la macro jugando a favor, según él, España está viendo si este año tiene un segundo unicornio -empresa valuada en US$1000 millones- cuando la Argentina ya tiene cinco "y tal vez este año llegará a ocho".

"La Argentina es un país de emprendedores. Los argentinos tienen hambre y el hambre no se hereda. Va más allá de la comida. Los argentinos tienen hambre de gloria, de comerse al mundo", afirmó.

En cuanto a FiReSPORTS, la organización de e-sports que creó Figueroa Reyes y que cuenta con gaming offices, estudios para producir contenidos, y que tiene una liga de Counter Strike, dijo que es un spin off de la agencia a partir de la experiencia de su hijo Jerónimo, que es streamer y jugador de Fortnite. "Las ligas son campeonatos que tienen jugadores que pertenecen a equipos que tienen coaches, psicólogos, nutricionistas y las marcas se meten porque, de esta forma, conectan con los jóvenes", explicó.

Por último, consultado acerca de lo que necesita la Argentina para capitalizar la oportunidad que abre la transformación digital, dijo que hay que llegar a un acuerdo para tener seis o siete políticas de largo plazo.

7. La tecnología como herramienta de desarrollo

Una aplicación que busca cambiar la forma de aprender, una firma cordobesa que desarrolla soluciones de Internet de las Cosas en Silicon Valley, una compañía que incorpora a personas de entornos complejos y una plataforma que ayuda a las marcas a volverse más competitivas en el e-commerce. Si bien los emprendimientos son diferentes, todos están atravesados por la tecnología. Sobre este eje giró el panel titulado "El ecosistema digital como impulsor del emprendedurismo", que moderó Del Rio.

Arbusta brinda servicios digitales y acompaña a compañías de todo el mundo en su proceso de transformación digital. Sin embargo, para Paula Cardenau, su directora y cofundadora, su sello distintivo es el equipo de trabajo conformado por 300 centennials de la Argentina, Uruguay y Colombia.

"Nuestro foco está puesto en desarrollar el talento allí donde hoy el mercado no mira. Una de las creencias más arraigadas que tenemos de la pobreza es que un pobre consume y es violento. Eso hace que la barrera invisible al momento de contratar a una persona sea altísima. Decidimos hacernos cargo de eso y armar una empresa que genere ese primer empleo", remarcó.

La aplicación Apprendo salió formalmente al mercado el 13 de marzo, con el objetivo de impulsar y facilitar el acceso a la educación extracurricular. Una semana después, el Gobierno decretó el aislamiento obligatorio y todo cambió.

"Un desafío bastante interesante es que había muchos profesores acostumbrados a dar clases presenciales. Entonces, identificamos ese problema y buscamos la manera de ayudarlos en este camino de transformación digital", explicó Verónica Silva, creadora de la app.

En 2013, Cecilia Flores y su marido fundaron WeBee, en Córdoba, una compañía que busca acelerar la adopción de Internet de las Cosas. Sin embargo, en 2015 las trabas para acceder a las importaciones hicieron que mudaran su negocio hasta Silicon Valley.

"Es importante intentar trabajar más como un ecosistema. Una de las cosas que funcionan muy bien es trabajar con empresas ya consolidadas en resolver problemas, junto a emprendimientos, para así ayudar a los emprendedores a acelerar su llegada al mercado", consideró.

Otro caso contado en el panel es el de Nubimetrics, un emprendimiento que se vio revolucionado por el boom que tuvo el comercio electrónico durante la pandemia. La plataforma, creada para brindar información al mundo del e-commerce y ayudar a las marcas a potenciar sus negocios, comenzó a tener una gran demanda de nuevos usuarios a partir de marzo.

"Dado el crecimiento exponencial y desordenado que tuvo el e-commerce durante la pandemia, la información cobró una relevancia nunca antes vista. Tuvimos que adaptarnos a nuevos clientes, con nuevas necesidades, y creamos una plataforma de educación en comercio electrónico", explicó Pamela Scheurer, cofundadora de Nubimetrics.

8. Ley de Teletrabajo, "freno de mano" a la economía

"Tener una buena infraestructura de telecomunicaciones es esencial, y cuanto más vayamos avanzando en la digitalización más esencial se vuelve", explicó Santiago Bilinkis, emprendedor y tecnólogo. Asimismo, aseguró que el Covid-19 fue un "extraordinario catalizador de cambio" y que la digitalización trajo aspectos positivos, ya que, tanto en la educación como en la medicina, se dieron saltos "hacia adelante".

En cuanto al teletrabajo, dijo que ha sido una revelación. "Ya sé que mucha gente está cansada de trabajar en su casa, de tener a los chicos todo el día, pero no hay que pensar en la situación coyuntural de ahora", afirmó. Y agregó que lo que pasó con la Ley de Teletrabajo fue "insólito" y que lo aprobado por el Congreso implica poner "un freno de mano" a todas las ventajas que esta modalidad demostró tener.

"La pandemia nos impulsó a hacer un montón de cambios de un minuto para el otro, y la productividad, no solo no baja, sino que sube. También aumenta la satisfacción laboral y la satisfacción de tener un balance entre la vida personal y la vida profesional", dijo.

9. La "última" oportunidad

Como cierre del evento, José del Rio entrevistó al empresario, conductor y CEO de Vorterix Media, Mario Pergolini, que se refirió a la actualidad argentina y dijo que, más allá de la inflación y de algunas leyes que resultan inaplicables, como la del teletrabajo, el país tiene una "última oportunidad", que es la de apostar a la educación y al desarrollo digital, después de no haber logrado industrializarse, por "pereza o malas administraciones".

"Creo que en este nuevo mundo la Argentina vuelve a tener una última posibilidad en la industria de lo digital, lo creativo, en donde hay que aprovechar todo eso, porque no vamos a tener más industrias grandes y lo digital necesita de un crossover de muchas disciplinas. Se necesitan ingenieros, diseñadores, se necesitan sociólogos, tenemos mucha big data, un montón de cosas que analizar, se necesitan filósofos. Y yo creo que la Argentina todavía tiene eso y tenemos ese hormigueo de poder realizar cosas. Entonces hay que aprovecharlo y hay que hacerlo", cerró.

Cómo creció el tráfico de Internet durante la pandemia

El tráfico de Internet a nivel país registró en abril -primer mes de cuarentena dura en la Argentina- un crecimiento del 65% respecto de igual mes de 2019, según la Cámara Argentina de Internet (Cabase)

"Como producto del aislamiento preventivo y obligatorio iniciado el 20 de marzo en la Argentina, se registró un importante crecimiento del tráfico, que durante marzo y abril llegó al 35%, en comparación al tráfico promedio de febrero, ubicándose para finales de abril en 780 Giga bits por segundo (gBps), lo que representa un crecimiento del 65% con respecto al mes de abril de 2019", indicó Cabase.

En la presentación de la edición del primer semestre del Cabase Internet Index, el presidente de la cámara, Ariel Graizer, deslizó la posibilidad de que antes de fin de año el tráfico de internet a nivel país pueda llegar a un Terabyte, lo que equivale a 1000 gigabytes (GB).

Esta medición da cuenta del tráfico que circula en la red nacional compuesta por 30 puntos regionales de interconexión (IXP), que incluye contenido internacional buscado y difundido por los usuarios desde la Argentina.

Desde Cabase señalaron que este incremento fue impulsado debido a que los usuarios comenzaron a subir una mayor cantidad de videos en los últimos meses.

En la entidad acotaron que, de hecho, la circulación de videos en internet "superó al consumo de televisión abierta y televisión paga".

En este marco, en la actualidad una de las plataformas más difundidas de contenido audiovisual acapara el 30% del tráfico en redes, a lo que se suma el uso de las videoconferencias que salieron del ambiente laboral y se expandieron al educativo y familiar.

"Los servicios paquetizados (internet más TV o internet más TV y telefonía) siguen empujando el crecimiento del video y otros servicios", indicó Graizer, quien agregó que el tráfico diario sigue reflejando la misma curva existente antes de la cuarentena, "con incrementos durante la mañana y el mediodía".

Lo que pasó en este tiempo en los hogares, ahora convertidos en oficinas, escuelas y espacios de entretenimiento, fue que hubo una necesidad de "duplicar la velocidad" de acceso a internet, dijo el directivo.

Según el informe, en marzo de 2019 las conexiones con velocidad superior a 20Mbps representaban tan solo un 29,02% del total del mercado, mientras que en marzo de este año ya alcanzaban un 47,97%, generando un gran crecimiento de la velocidad promedio, que pasó de 17 Mbps en marzo del año pasado a 38 Mbps en el tercer mes de 2020.

Como parte de este proceso, se observó también una sustancial disminución en las conexiones con velocidades inferiores a 20 Mbps, que cayeron de un 70,98% a un 52,03% del total de conexiones en el mismo lapso.

La capacidad de dar accesos con mejores niveles de velocidad está atada a la tecnología con la que se llega a la casa del cliente, por lo cual "es necesario un mayor desarrollo de la infraestructura de fibra al hogar", indicó Graizer.

La Argentina contaba con 1.047.817 conexiones por fibra óptica en el mes de marzo último, con un crecimiento de 64,4% respecto a ese mes del año pasado.

En la comparación interanual por tipo de tecnología, la fibra óptica acusó un continuo incremento, seguida de los accesos con cable modem y los inalámbricos.

 

Por su parte, las cuentas de ADSL (línea de abonado digital asimétrica) habían registrado en 12 meses la caída de 800.000 conexiones, con una merma del 27%.

A nivel país, 2618 localidades cuentan con acceso a internet. De ese total, el 34% es con sistema alámbrico; el 20%, inalámbrico, y el 46%, con ambos tipos de tecnologías de acceso.

 

Por: María Julieta Rumi, Melisa Reinhold y María Filgueira