Ernesto Martelli
LA NACION 3 de enero de 2016
Ya se ha dicho: durante 2015, referentes digitales como Amazon, Netflix,
Google o Apple abrieron librerías, fueron nominados al Oscar, llegaron a los
cines, fabricaron autos y hasta vendieron relojes, avanzando con su liderazgo
sobre terrenos más tradicionales.
El fenómeno, que vincula a estas disrruptivas compañías con valuaciones
millonarias y negocios convencionales, aún no ha sido bautizado por los
analistas.
Los últimos días de 2015 –gracias a inundaciones
en diferentes puntos del planeta, temperaturas récord y al gran acuerdo por el
cambio climático– serán recordados también por el avance del concepto "antropoceno": sirve para definir
la actual época geológica caracterizada por
las consecuencias ambientales de la actividad humana.
Siguiendo esa lógica, culturalmente, estaríamos atravesando el
"digitozoico": una era en el que lo digital deja de ser una burbuja
aislada para empezar a definir el universo de todos los negocios. Y promete ser
una de las claves a atender el año naciente.
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